8 formas de llevar una vida más tranquila y en armonía (por Gaucho Zen)
El mundo en el que vivimos constantemente nos invita a poner el pie en el acelerador, a ir más rápido, a hacer más cosas, y no hay nada de malo en eso, el asunto es que nuestro sistema nervioso puede que no esté preparado para eso y puede que lo estemos sobrecargando demasiado innecesariamente.
Nuestro cerebro es un equipo eléctrico y si lo sobrecargamos corremos el riesgo de quemarlo, lo que se conoce como "stress".
Siempre van a haber más cosas para hacer, más eventos a los que asistir, más videos para mirar, más artículos para leer, y más trabajo por hacer y pretender lograr hacerlo todo al 100% es querer dar una batalla que no podemos ganar.
Estas son las 8 cosas que hago en mi vida cotidiana para enlentecer un poco el ritmo de vida y poder tener tiempo para hacer las cosas que de verdad son importantes hacer.
1. Comenzar el día a bajas revoluciones
La mayoría de las personas escucha el despertador, salta de la cama y sale corriendo al trabajo a veces hasta sin desayunar por falta de tiempo. Esa es una pésima forma de comenzar un nuevo día en esta bendita tierra. Es comenzar el día desde atrás. Quizás levantarse 30 minutos antes sea útil. A mi me gusta levantarme y hacer algo totalmente lento antes de salir de mi casa como por ejemplo leer por 30 minutos, meditar, tomar té o escribir
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Mucha gente tiene la costumbre de levantarse y chequear las notificaciones en el celular y empezar a responder a todo el mundo. Tampoco recomiendo eso. A mi por ejemplo me gusta chequear el celular o e-mail hasta pasadas al menos las diez de la mañana cuando he concretado o al menos encaminado todo lo que YO tenía para hacer. La forma en que comienzás tu día determina como va a ser el resto de tu día, si querés tener un día tranquilo y en armonía debemos ser conscientes del ritmo con el que arrancamos desde la primera hora de la mañana.
2. Practicar el silencio y meditar
Ya sea por el televisor, música, tráfico o hablando con gente, la mayoría de nuestro día estamos con algún sonido de fondo. Tomate unos momentos para estar a solas y en silencio.
Meditar también puede ser útil. Pocas cosas aquietan la mente como meditar. No es necesario meditar dos horas al día. Empieza lento, con cinco minutos al día ya es un buen comienzo y como dice el proverbio zen:
“Si no tienes 10 minutos al día para meditar, deberías meditar tres horas al día”
3. Practicar el arte de hacer una sola cosa a la vez
En un mundo donde el tiempo parece ser escaso, nos vemos tentados a querer intentar hacer varias cosas al mismo tiempo. Todos sabemos que cepillarse los dientes, mientras hablamos por teléfono al tiempo que respondes correos electrónicos termina siendo contraproducente. Adopta la práctica de realizar una, y solo una cosa a la vez.
Por ejemplo, si comes, solo comes, no hablas. Si respiras, solo respiras. Si caminas, solo caminas, no piensas.
Aprende a identificar y desglosar lo que haces en actividades independientes. No se trata de vivir el 100 % del tiempo así, sino de tomarse unos momentos al día para ser consciente de lo que estamos haciendo.
4. Prestarle atención a la respiración
Practica el arte zen de observar tu respiración. Observa el aire que entra y sale por tu nariz hacia tus pulmones por que la forma en la que respiramos determina la forma en la que pensamos y la forma en la que pensamos, determina la forma en que actuamos.
5. Ir a la naturaleza
La naturaleza tiene su propio ritmo, es el ritmo natural para el cual fuimos hechos y deberíamos estar siguiendo. La vida en la ciudad se puede volver bastante desagradable a veces. Realiza escapadas hacia la naturaleza al menos una vez a la semana para sincronizar con ese ritmo. Si no podés hacer una escapada a la naturaleza simplemente mirar cosas tranquilas como la copa de los árboles, las nubes pasar, el mar o las estrellas por apenas cinco minutos puede afectar tu día de una manera que no te imaginas.
6. Practicar el arte zen de no hacer nada
A mucha gente le puede resultar difícil meditar o contemplar su respiración porque sienten que tienen que saber alguna técnica o deben sentarse en posición de loto. Tómate unos minutos al día para simplemente no hacer nada ya sea tirado en la cama, en el pasto o en la posición que más disfrutes. Yo utilizo www.donothingfor2minutes.com para relajarme y bajar a tierra durante el día.
7. Rodeate de gente tranquila y evita a las personas demasiado aceleradas
Somos el promedio de las cinco personas con las que más tiempo pasamos. Si te juntas con personas nerviosas, terminarás nervioso, si te juntas con personas tranquilas, estarás tranquilo. No se trata de evitar a las personas nerviosas, simplemente de ser consciente con quien nos juntamos e intentar pasar más tiempo con aquella gente que vive como deseamos vivir.
8. Comer más lento
Muchas veces nos vemos tentados a realizar nuestras comidas mirando el televisor o conversando con mucha gente. Eso además de generar ansiedad hace que comamos de más.
Practica el arte de comer a solas y en silencio masticando y saboreando cada bocado, tomándote tu tiempo.
La forma en que tragas afecta tu digestión, la forma en que digieres afecta tus pensamientos, la forma en que piensas afecta como actúas, la forma en que actúas determina tu realidad.
Practica el arte de comer a solas y en silencio masticando y saboreando cada bocado, tomándote tu tiempo.
La forma en que tragas afecta tu digestión, la forma en que digieres afecta tus pensamientos, la forma en que piensas afecta como actúas, la forma en que actúas determina tu realidad.
Conclusión
Para bajarle la velocidad a nuestro estilo de vida es importante aprender a administrar nuestras energías y nuestro tiempo con inteligencia, es hora de recuperar el control sobre nuestra vida y dejar de ser como un tronco que flota entre las olas que lo empujan. El stress, como me dijo un amigo, es totalmente opcional y solo lo sufre quien no se sabe administrar.
Podés empezar practicando al menos una de las 8 claves que aquí leíste, te recomiendo probar una cosa a la vez. Quizás enfocarte en probar una de estas cosas a la semana sea un buen comienzo. Y cada semana ir agregando otra.
Podés empezar practicando al menos una de las 8 claves que aquí leíste, te recomiendo probar una cosa a la vez. Quizás enfocarte en probar una de estas cosas a la semana sea un buen comienzo. Y cada semana ir agregando otra.
Eso es todo, “take it easy my friends” y como dice un Gaucho amigo, tranquilicen-zen : )
Por Gaucho Zen
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Twitter: @federico_san
Blog: www.gauchozen.com
Podcast: www.gauchozen.com/podcast
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