La semana pasada estuvimos hablando de cómo el embarazo está de moda entre las celebrities, recalcando para nosotras las simples mortales de carne y hueso (que no tenemos a la orden del día niñeras, ni batería de tratamientos estéticos y cirugías mágicas), la importancia de disfrutar de ese momento tan increíble, sintiéndonos espléndidas y divinas durante todo el proceso.
Ahora bien, ¿qué pasa después de que tu bebé ya nació y vos querés volver a recuperar tu cuerpo pre baby?
Seguro no sabés por dónde empezar!
Así que tranquila! Hoy te voy a pasar algunos tips para que lento, con calma, pero seguro, recuperes tu figura, y te sientas aún más divina que antes.
Ahora bien, antes de pasar a tirarte todos los piques, recordá que la lactancia es un periodo en que las necesidades energéticas y nutritivas son altísimas debido al gran esfuerzo que realiza tu metabolismo en el proceso de producción de la leche. Por lo que dormir lo suficiente y alimentarse adecuadamente es fundamental. Si estás amamantando, tenés que asegurarte de tomar las cosas con calma. Recordá que perder peso muy rápido puede impactar de manera negativa tu producción de leche.
Aclarado esto pasemos entonces a los tips para los post baby bodies!
1. Los profesionales recomiendan respetar las 4 comidas del día, esto es, desayuno, almuerzo, merienda y cena, pudiendo realizar 2 pequeñas colaciones entre comida y comida. De esta manera, le das a tu cuerpo pequeñas raciones de energía a lo largo de todo el día, evitando caer en el clásico picoteo. Las colaciones pueden ser un yogurt con cereales, alguna fruta, verduras, barritas de cereales sin azúcar, etc.
2. Recordá lo que ya hemos hablado de cómo debe conformarse tu plato ideal, mitad de verduras, un cuarto de proteínas, y el otro cuarto de carbohidratos de buena calidad.
10. Realizá ejercicio tan pronto como sea posible y siguiendo obvio las recomendaciones de tu médico. Comenzá despacio, aumentando la intensidad de a poco, sin sobre exigirte.
Espero que estos tips te ayuden y den una guía para comenzar a recuperar tu figura, pero no olvides: date tu tiempo, disfrutá de tu hijo y empezá de a poco a comer mejor y adquirir hábitos más saludables. Con este combo seguro vas a sentirte mejor que nunca!
Nos leemos en una semana!
Ahora bien, antes de pasar a tirarte todos los piques, recordá que la lactancia es un periodo en que las necesidades energéticas y nutritivas son altísimas debido al gran esfuerzo que realiza tu metabolismo en el proceso de producción de la leche. Por lo que dormir lo suficiente y alimentarse adecuadamente es fundamental. Si estás amamantando, tenés que asegurarte de tomar las cosas con calma. Recordá que perder peso muy rápido puede impactar de manera negativa tu producción de leche.
1. Los profesionales recomiendan respetar las 4 comidas del día, esto es, desayuno, almuerzo, merienda y cena, pudiendo realizar 2 pequeñas colaciones entre comida y comida. De esta manera, le das a tu cuerpo pequeñas raciones de energía a lo largo de todo el día, evitando caer en el clásico picoteo. Las colaciones pueden ser un yogurt con cereales, alguna fruta, verduras, barritas de cereales sin azúcar, etc.
2. Recordá lo que ya hemos hablado de cómo debe conformarse tu plato ideal, mitad de verduras, un cuarto de proteínas, y el otro cuarto de carbohidratos de buena calidad.
3. Tratá de incluir alimentos que sean ricos en fibra. Y asegurate de incluir todos los días sopa de verduras y ensaladas al menos 2 veces al día. Mejoran la sensación de saciedad y previenen el estreñimiento.
4. Evitá consumir en forma excesiva grasas y proteínas de origen animal, seleccioná lácteos descremados, consumí carnes magras, y proteínas de origen vegetal.
5. Para endulzar dejá de lado el azúcar, y utilizá edulcorantes no calóricos.
6. Para asegurar una correcta producción de leche materna para tu bebé asegurate de tomar 3 litros de líquido, esto incluye agua, té, sopa, y otras bebidas sin cafeína ni azucaradas por supuesto.
7. Comé despacio, masticando tranquilamente cada bocado hasta que te sientas satisfecha, no es necesario que comas todo lo que está en tu plato, cuando te sientas llena pará.
8. ¿No tenes tiempo de cocinar? Bueno, preparate un buen sándwich de pan integral, o un omelette con muchas verduras, queso descremado, y una proteína magra.
4. Evitá consumir en forma excesiva grasas y proteínas de origen animal, seleccioná lácteos descremados, consumí carnes magras, y proteínas de origen vegetal.
5. Para endulzar dejá de lado el azúcar, y utilizá edulcorantes no calóricos.
7. Comé despacio, masticando tranquilamente cada bocado hasta que te sientas satisfecha, no es necesario que comas todo lo que está en tu plato, cuando te sientas llena pará.
8. ¿No tenes tiempo de cocinar? Bueno, preparate un buen sándwich de pan integral, o un omelette con muchas verduras, queso descremado, y una proteína magra.
9. Llená tu heladera y alacena de alimentos saludables, y evitá tener a mano todos aquellos que tanto te tientan, dejándolos para los momentos en que te queres premiar con algún gustito.
10. Realizá ejercicio tan pronto como sea posible y siguiendo obvio las recomendaciones de tu médico. Comenzá despacio, aumentando la intensidad de a poco, sin sobre exigirte.
Espero que estos tips te ayuden y den una guía para comenzar a recuperar tu figura, pero no olvides: date tu tiempo, disfrutá de tu hijo y empezá de a poco a comer mejor y adquirir hábitos más saludables. Con este combo seguro vas a sentirte mejor que nunca!
Nos leemos en una semana!
Naty
@natyblogger
Ph: mujerhoy.com, telefama.com, hibrofun.com
@natyblogger
Ph: mujerhoy.com, telefama.com, hibrofun.com
Buenos típs en general. Discrepo en la parte que dice que tomar líquidos ayuda a la producción, eso es un mito, puede ser que tengas más sed pero no está relacionado directamente con la producción de leche materna. A más oferta y demanda más producción. Eso es lo único que garantiza que el cuerpo produzca. Besos
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