ITALIANOS Y MANEJO DEL TIEMPO, POR GAUCHO ZEN
La falta de tiempo parecería ser una epidemia más extendida que el propio virus del zika. La gente tiene cada vez menos y menos tiempo y todo el mundo que conozco se queja de que el tiempo no le dá para nada.
¿Pero que tal si te dijera que hay una forma de lograr hacer en 2 horas lo que actualmente te está tomando 8?
¿Qué tal si te dijera que hay un atajo, una manera rápida de hacer las cosas y hackear lo que el grueso de la gente percibe como el continuo espacio-tiempo?
Quizás tu jefe te pida que estés en una oficina por 8 horas por que ese es el tiempo por el cual te están pagando por estar. Alego contra eso, no importa la cantidad de horas que te la pases en una oficina, lo importante es la cantidad de resultados que produzcas. Medir el trabajo en horas es algo primitivo y es algo que vamos a estar viendo pasar de moda en el correr de los próximos años, lo único que importa de verdad es la cantidad de resultados que logremos mostrar.
¿Que tal si en 2 horas de trabajo lograrás producir lo que antes te tomaba 8?
¿O qué tal si en 2 horas de trabajo logras generar los mismos resultados que uno de tus compañeros logra en doso tres días de trabajo?
La triste realidad es que los jefes tienden a ver y valorar gente ocupada y no saben medir claramente los resultados verdaderos que una persona produce. Imaginate que en 2 horas de trabajo puedas concretar más ventas que uno de tus compañeros en dos días enteros y pudieras tomarte el resto del tiempo que te ha sobrado para disfrutar y vivir la vida.
Es cierto, a tu jefe no le va a agradar verte sentado en tu silla mirando el techo por más que hayas batido el record de ventas de tu empresa.
Tu jefe te quiere ver activo, corriendo de aquí para allá con un teléfono en la mano, o tecleando como mono sobre una computadora, no importa lo que estés haciendo siempre y cuando PAREZCA que estás haciendo algo.
¿Querés que te diga una forma de lograr un aumento rápido? Ponete a correr como una gallina descocada gritándole a un teléfono apagado por los pasillos de tu empresa y tu jefe y el resto de los compañeros van a decir “Ahí va alguien que trabaja duro, denle un aumento”.
Pero no se trata de eso este artículo, este artículo se trata de generar más resultados reales. Si trabajas para vos por que manejas tu propio negocio, es posible que las 2 técnicas que vienen a continuación te alegren el día, ya que no es tanta la presión de tener que mostrar y aparentar que estás haciendo algo.
Estas son lo que yo llamo las “2P`s” y vienen directamente desde Italia para que puedas hackear tu propia vida y demostrar ante todos que el trabajo inteligente y organizado, le ganan al trabajo duro.
1. La Regla de Parkinson
La regla de Parkinsos sostiene lo siguiente:
“El trabajo tiene la capacidad de expandirse o contraerse hasta adaptarse al tiempo que había disponible para hacerlo.”
Eso quiere decir que si tenés un trabajo o tarea que normalmente te tomaría 8 horas, y por alguna razón solamente tenés 2 horas para terminarlo, vamos a acelerar nuestro ritmo para que en 2 horas quede el trabajo terminado.
Ya has experimentado esta regla varias veces y no es nada nuevo para ti, y por eso te voy a pedir que recuerdes aquella vez que tenías que salir del trabajo a las 11 a.m. para ir al dentista y tuviste que terminar todo lo que tenías para hacer en el día antes de irte.
O la vez que tenías 1 mes para terminar una entrega y comenzaste 4 días antes de la fecha límite.
O la vez que te fuiste de vacaciones y en una semana tuviste que terminar en una semana antes de irte lo que habías estado postergando por los últimos 3 meses.
La mayoría de la gente no está trabajando las ocho horas de su horario, por más que se quiera engañar haciendo que trabaja resolviendo pequeñeces sin importancia o respondiendo a cientos de cadenas de e-mail que tampoco tienen importancia. La realidad es que la mayoría de la gente tiene la tendencia a dilatar lo que tiene para hacer hasta consumir el tiempo que había disponible. Y leer e-mails NO es trabajar, deja de engañarte, leer mails NO produce resultados por más que tu propio jefe te quiera hacer creer que sí lo hace.
Para hacer uso de esta brillante regla es útil fijar otras actividades o compromisos que te obliguen a poner fin al trabajo, como por ejemplo agendar una sesión de entrenamiento a las 5 p.m. o quedar en ir a tomar un café con un amigo.
Claro que tu compañía va a valorar más al que se quede hasta las 10 de la noche en la oficina, por más que se quede jugando al solitario en la computadora. Pero una vez que los resultados vengan, y tu jefe vea el equivalente financiero que tus resultados han generado, te va a ser más fácil salir de la trampa de intercambiar tiempo por dinero.
En este video podés ver una explicación más detallada de como aplicar la regla de Parkinson.
2. La Regla de Paretto
La regla de Paretto dice que:
“El 80% de los resultados, van a estar generados por el 20% de los recursos”
Por ejemplo:
- El 80% de las ganancias van ser generados por el 20% de los clientes.
- El 80% de las ventas, van a ser generadas por el 20% de los productos que ofrecemos.
Yo aplico esta regla para todo en la vida. A esta altura se ha convertido como en una especie de sexto sentido y es medio como una religión.
Siguiendo con los ejemplos…
- El 80% de los problemas y dolores de cabeza van a venir por el 20% de los clientes.
- El 80% de tu felicidad, va a venir por el 20% de las actividades que haces.
- El 80% de tu felicidad, va a venir por el 20% de las personas con las que te relacionas.
- El 80% de la comida que produce una huerta, va a venir del 20% de lo que ha sido plantado.
Yo por ejemplo sé que si tengo 10 cosas en mi lista de tareas para hacer en el día, hay dos de ellas que van a ser las más importantes y van a generar la mayor parte de los resultados. Las restantes 8 por lo general van a ser cosas de menor importancia.
¿Vamos viendo por donde viene la mano?
A mi me gusta agarrar la lista, ver las dos o tres tareas más importantes para hacer y patear las restantes sin importancia para el día siguiente o el otro.
Si puedo eliminarlas de la lista y no hacerlas mejor porque hay cosas que a veces ni siquiera necesitan ser realizadas desde un principio.
Otras veces podemos delegar las cosas de menor importancia en otra persona, quizás un compañero nuevo o alguien que gane menos que uno. Si de verdad queremos hacer que nuestro tiempo valga, tenemos que aprender a identificar las cosas que de verdad importan y generan resultados porque NUNCA, jamás de los jamases, vas a poder hacer 100% de todo lo que tenés para hacer, es una batalla que no vamos a poder ganar así que es momento que dejemos de intentar ganarla.
Aprende a hacerte todas las mañanas la siguiente pregunta:
“¿Si solo pudiera hacer una sola de las cosas en la lista, cual de ellas haría que el día fuera satisfactorio? ¿Cuál de ellas me dejaría contento al final del día por más que no lograse hacer nada más?”
Aprende a sacrificar lo pequeño para ganar lo grande.
Conclusión:
No importa que tipo de trabajo estés haciendo, a partir de hoy debes empezar a vivir sabiendo que trabajar 8 horas es totalmente opcional e innecesario.
Claro que podés usar las reglas explicadas para maximizar resultados, es decir, si querés trabajar 8 horas podés hacerlo y generar 4 veces más resultados. Si bien por temas de codicia y círculos viciosos espiralizantes desaconsejo, es lo que tu jefe te va a decir cuando te vea mirando el techo 6 de las 8 horas libres que a partir de hoy deberías empezar a tener si aplicas lo expuesto.
Trabajar 8 horas y no saber tomarse el tiempo para organizar el trabajo también es una forma de pereza y olgazanería, es hora de aprender a trabajar en función de resultados y no por tiempo.
Si querés seguir viendo tips sobre manejo del tiempo con nombres de Italianos que comienzan con P, hacé click aquí para ver la técnica de Pomodoro.
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