22 de marzo de 2017

MADRES QUE NO QUIEREN DE MANERA SANA


Es muy difícil separar las cosas en cuanto al amor primario, que es el que sentimos por los padres, porque hagan lo que hagan, no podemos evitar quererlos por ser nuestros padres. Muchas veces por más que no queramos hacerlo, el amor está. Nos dieron la vida y automáticamente los queremos, aunque pensemos que no lo merecen. Por eso hoy queremos dedicarle esta entrega de la columna a conversar sobre las relaciones primarias, y en particular con las madres.

Hay dos cosas que quiero aclarar antes de escribir este artìculo:
  • Una: el conocido e incomprendido complejo de EDIPO marca muchas cosas de nuestra personalidad, pero no tiene por qué determinarnos. 

En cuanto al EDIPO, es importante saber que se trata de la conformación de la personalidad, entre otras cosas, y que nuestro primer vínculo importante, es el materno. Ahora, ¿qué pasa cuando ese primer vínculo no es sano? ¿qué pasa cuando la forma de querer de mamá no es la mejor? ¿qué hacemos con eso que nos afecta el resto de nuestras vidas? ¿qué pasa cuando papá no está para decir que no está bien querer así, que no nos hace bien?
  • Y dos: lo que la persona es, no es lo q nos pasa a nosotros con ella. Aunque a veces cueste diferenciarlo.
Relacionándolo con la primer aclaración, lo que a nosotros nos pasa con una persona, no es lo que la persona es, porque proyectamos parte de nosotros en eso, y lo vemos desde nuestro lente. Manchado por toda nuestra experiencia y subjetividad. ¿qué hacemos con eso? ¿cómo nos damos cuenta que no tiene que ver con nosotros? Porque probablemente la forma de actuar de ellos, tiene más que ver con lo que los formó a ellos que con lo que nosotros estemos haciendo.

Es muy difícil separar las cosas en cuanto al amor primario, que es el que sentimos por los padres, porque hagan lo que hagan, no podemos evitar quererlos por ser nuestros padres. Muchas veces por más que no queramos hacerlo, el amor está. Nos dieron la vida y automáticamente los queremos, aunque pensemos que no lo merecen.


Hay madres frágiles, que son incapaces de brindar el sostén que un niño necesita. Y sino se sostiene a un niño, es probable que sienta muchas carencias al crecer y lo manifieste de diferentes formas. Puede resistirse a los vínculos, ser dependiente o todo lo contrario, buscar relaciones poco sanas con tal de no estar solo o quedarse solo para no ser lastimado. Hay infinidad de posibilidades, en cuanto a lo que puede ocurrir con un niño que no tiene ese amor primario sano que todos esperamos. 


La realidad es que nuestros padres no son más que humanos y a ellos también les pasan cosas. Por lo que probablemente, ese amor incondicional e ideal que buscamos, ninguno lo tenga. 

Y repito ¿qué hacemos con eso? Tantos años con un patrón que se repite, buscando un hombre y pensando que lo necesitamos, sólo porque no hubo uno que pusiera un límite a ese amor poco sano. O alejándose de los hombres, sólo porque el primer hombre en nuestra vida no hizo lo que necesitábamos, o no pudimos contar con él. 

Y eso es separar los tantos, poder diferenciar lo que ocurre de lo que sentimos, y principalmente, dejar de tener esa idea de que si el primer hombre en nuestra vida fue de determinada manera, los demás también deben o van a ser así. Porque nuestro primer vínculo no fue sano, no sabemos relacionarnos, pero es un problema nuestro, interno. Nos enfermamos por esto, nos duele la cabeza porque vivimos preocupados, nos quedamos sin voz porque no podemos hablar, y generamos síntomas.


Esperamos tanto del otro que lo alejamos con demandas, o no esperamos nada entonces cuando nos da lo que no esperamos desconfiamos, y volvemos a alejarlo.

Todo esto, porque mamá es persona y no tiene un amor sano. No podíamos pensarlo en ese momento y ahora, de adultos, nos damos cuenta pero ya lo naturalizamos. Obvio que la queremos igual, porque es lo natural, pero seguimos esperando más. Y si el problema fue con papá, porque no estaba y busco un hombre que sustituya y haga lo que el no hizo. ¿cómo solucionar esto? ¿cómo pensarlo y vivir con esto? ¿cómo dejar de enfermar y pensar en lo que pasa y pasó?



Creo que la única forma en que podemos cambiar nuestra mentalidad es dejar de esperar de otros lo que podemos hacer por nosotros mismos. Si no recibimos lo que esperábamos o necesitábamos de nuestros padres, puede venir de nosotros.


By Pilar
Psicóloga in Training

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